Claxon
Marchantes de poderosas voces
Rumbadera de motores con sonoros escapes
Multitud bulliciosa del transporte urbano
Rieles chirriantes, se rompe el viento con pesados carros
Pordióses penosos de menesterosos y desaposentados
Estremece la sirena de la tragedia incógnita
Tacones de rítmica prisa
Y el llanto de un niño; y el femenino grito que anuncia la infamia;
muy masculino el insulto… todo se ahogan en el torrente amplificado,
establecido o ambulante,
del ruidoso comercio.
Y a pesar de todo, a cada paso hay pautas sonoras
se entretejen con el caótico entorno;
sensibilidad a la música para superar la indiferencia;
exquisitos los timbres, intervalos,
afinaciones que armonizan el desastre;
repeticiones persistentes y rítmicas;
tonalidades y contornos melódicos.