(CNN Español) — El equipo de prensa de la expresidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, denunció este lunes supuestas demoras en los permisos de ingreso para el equipo médico de la exmandataria al centro penitenciario donde está detenida. En un comunicado publicado en las redes sociales de Áñez, se explicó que durante la mañana del lunes sufrió “una descompensación en su estado de salud”.
El texto indica que el médico del centro penitenciario se comunicó con el médico de cabecera de Áñez “para informarle que ella se encontraba con un cuadro de temperatura arriba de los 40 grados”. Agregan que “inmediatamente” se presentó una solicitud escrita de autorización para que su médico y personal de laboratorio pudieran ingresar.
“Ante la solicitud, la gobernadora del penal pidió el informe del médico del mismo penal, quien le transmitió un cuadro febril de la exmandataria”, informaron. “Lamentablemente, y pese a la urgencia, no se autorizó el ingreso de su médico en el transcurso de la mañana”.
“Durante los últimos días, se ha visto un retraso de las solicitudes de ingreso de médicos especialistas y de equipos de laboratorios, lo cual continúa perjudicando su ya delicado estado de salud”, explica el comunicado.
El médico habría recibido permiso para ingresar a las 3 P.M., hora local, y el personal de laboratorio podría ingresar este martes a las 9 A.M.
CNN está intentando comunicarse con la Dirección General de Régimen Penitenciario para obtener comentarios sobre el reclamo del equipo de la expresidenta interina.
El viernes pasado, en entrevista con La Razón Radio, el director nacional del Régimen Penitenciario, Juan Carlos Limpias, señaló que Áñez permanece en un “espacio de salud” separado del resto de la población de la cárcel de mujeres de Miraflores, en un sector “totalmente seguro y en óptimas condiciones”. Agregó que se ha permitido a la familia visitas diarias en las que le llevan alimentos debido a que, según Limpias, Añez se niega a ingerir comida del penal por miedo a que se “cometa algún ilícito”.
El doctor de Áñez, según el comunicado, señaló que, tras revisar a la exmandataria, se “encuentra con un cuadro de hiperventilación, síndrome febril y dolores agudos en el estómago, lo cual podría devenir de una complicación renal u otro, que en todo caso deben descartarse con los análisis auxiliares médicos solicitados, para determinar un diagnóstico preciso”. Estos exámenes “revisten carácter urgente” y se tendrían que “realizar en el día”, lo que “no fue posible debido a la negativa de la gobernación del penal”.
Áñez se encuentra detenida de manera preventiva mientras se la investiga por los delitos de sedición, terrorismo y conspiración, en el caso del supuesto “golpe de Estado” que lleva adelante la Fiscalía boliviana. El pasado 13 de marzo fue detenida en la ciudad de Trinidad, del departamento del Beni, y trasladada a La Paz por la Fiscalía y la Policía Boliviana para su investigación.
Un día después, la justicia determinó su detención preventiva por 6 meses, mientras dure la investigación. En su momento, Áñez afirmó que tal golpe de Estado “nunca” ocurrió y denunció una persecución política en su contra.
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